La desaceleración económica ha tardado en calar en los precios, que sólo ahora empiezan a acusar la atonía del resto de indicadores.
Uno de los elementos que previsiblemente determinará más caídas de precios es la mala evolución del consumo. Las ventas en el comercio minorista cayeron en agosto por cuarto mes consecutivo. El descenso es del 5,9% respecto al mismo mes del año anterior si se elimina el efecto de la inflación y calendario.
La bajada más acusada se da en equipamiento del hogar (un 15,8%), mientras en la alimentación los descensos resultan mucho más moderados. El empleo en el sector cayó un 0,5% tanto en tasa interanual como con respecto a julio.
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OPINION PERSONAL
Es algo bueno que la inflación se desacelere puesto que de este modo se producira una subida pero con mayor lentitud, como mal es que las ventas al minoristas an caido por cuarto mes consecutivo y como algo bueno la bajada del equipamiento del hogar.
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